Opiniones
Cada vez que veo una foto de Roberto Rainer Cinti
siento la misma saludable envidia de todos aquellos que, a través
de un texto, debemos luchar contra indómitas tropillas de
palabras para lograr resultados equivalentes a los de un fotógrafo
talentoso.
No sé cómo hace para sacar ciertas
fotos. No alcanzará, desde luego, con apostarse, trípode
en mano, a la espera del instante propicio, ese momento mágico
en que las cosas se muestran lo suficiente pero jamás demasiado.
Tampoco alcanzará, de seguro, con acechar la alborada o esperar
los últimos pasos de un sol fragante.
Hay algo más. Es el instinto del arquero
Zen, que con los ojos cerrados pone la flecha en el blanco. Lo que
distingue a un fotógrafo bueno de un burócrata de
la foto.
Eduardo
Belgrano Rawson
Escritor
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Opinions
Each
time I see a photograph by Roberto Rainer Cinti I feel the same
healthy envy of all those who, by means of a text, have to struggle
against untamed herds of words in order to achieve results equal
to the ones of a talented photographer.
I
don’t know how he manages to take certain pictures. It won’t
do, of course, to place oneself, holding a tripod, and wait for
the propitious instant, that magic moment when things show enough
but never too much. It won’t do either, I’m sure, to
ambush the dawn or to lie in wait for the last traces of a fragant
sun.
There’s
some thing else. It’s the instinct of the Zen archer, who
can put his arrow through the target with closed eyes. It is what
distinguishes a good photographer from a photograph’s bureaucrat.
Eduardo Belgrano
Rawson
Writer
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